Como parte del programa de entrenamiento gerencial “Dirigiendo al Equipo”, revisamos el proceso de desarrollo de equipo y de cómo construir consistentemente grupos de trabajo de alto rendimiento.
Este programa de 3 días cubre muchos temas, sin embargo le compartimos tres consejos que puede aplicar desde el día de hoy:
1. Desarrollar un claro sentido de Propósito
Puede sonar obvio, sin embargo en el momento crítico de tener a la gente trabajando bien, son los individuos los que hacen que el grupo tenga y comparta un propósito. Con una clara visión, los individuos pueden saber en dónde enfocar sus esfuerzos y cuáles serán las prioridades. Entre más inspiradora y convincente sea la visión, habrá más energía y compromiso hacia una meta. Desde luego que no todos los departamentos pueden tener un propósito excitante como lo es curar cáncer o eliminar la pobreza, pero si no se tiene una meta claramente articulada, será difícil de lograr una cohesión. Los buenos gerentes se aseguran de que su equipo tenga un sentido de propósito en común y un sentido compartido de la visión o sueño por el que están trabajando.
2. Ser sistemático sobre el Desarrollo de Habilidades
Los miembros de un equipo pueden dar lo mejor de sí solo en la medida en la que cuenten con el conocimiento y las habilidades que necesitan para desempeñar su trabajo competentemente. Usualmente los Gerentes promedio hacen supuestos sobre como apuntalar el conocimiento y son autocomplacientes sobre la necesidad de refrescar habilidades o ayudar a las personas a aprender nuevas técnicas. Por otro lado lo Gerentes de excelencia se toman el tiempo para evaluar competencias de manera sistemática y ayudan activamente a las personas a que adquieran la capacidad de cómo hacer las cosas que necesitan con el fin de que desarrollen un excelente trabajo.
3. Responda a la “Holgazanería Social”
Un fenómeno muy conocido es las ciencias sociales es que cuando un equipo es de más de 3 o 4 personas existe una tendencia marcada de que algunos individuos se “relajen” y no contribuyan con lo mejor de sí, y dejan que otros trabajadores hagan más; esto se denomina “holgazanería social”. Gerentes de excelencia responden a esta tendencia estableciendo metas claras e individuales, tal que las personas conozcan exactamente lo que se espera que cumplan. Además de hacer que la contribución individual sea visible hacia el equipo.
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Ésta es la liga de información de nuestro programa de entrenamiento a la medida Dirigiendo al Equipo